Milton Erickson fue todo un innovador en la aplicación de la hipnosis para facilitar cambios positivos y duraderos en la vida de sus clientes.
A diferencia de modelos anteriores más autoritarios e influenciados por la psicología cognito-conductual, para Milton Erickson era muy importante conocer las circunstancias psico-emocionales de sus clientes para adaptar cada sesión a sus necesidades.
Con ello creó su propio modelo, conocido como la hipnosis ericksoniana que se caracteriza por tres puntos clave:
1) Enseñar a sus pacientes a ser más felices
2) Usar el sentido del humor
3) Invitar a crear una mirada hacia un futuro esperanzador para que sus clientes tomaran consciencia de que el cambio valía la pena.
La hipnosis es potencialmente útil para:
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– ampliar conocimientos y recursos a coachs, terapeutas y psicólogos,
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– acompañar a personas en procesos de mejora personal.
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– autoaplicarnos y mejorar nuestro estado anímico, acceder a nuestros recursos internos y parte creativa, alinearnos para responder mejor ante momentos de dificultad y potenciar nuestro propio bienestar.